Un viejo que leía novelas de amor de Luis Sepúlveda (1949-2020)
¿Cómo llegué a este libro? Fue una recomendación de varias de las cuentas de Instagram que sigo: @ladamadelanovela, @la_huella_de_los_trazos y @juanandelavilla. Los tres coincidían en que era maravilloso. Confieso que creía haberlo leído ya, pero no lo recordaba y lo he releído.
Luis Sepúlveda, escritor, cineasta y periodista chileno, vivió en Gijón desde 1997. Fue el primer paciente de COVID que murió en Asturias.
Novela publicada en 1988 y ambientada en la selva Amazónica de Ecuador.
Los protagonistas son Antonio José Bolivar Proaño (el viejo), Rubicundo Loachamin (el dentista, que visitaba el pueblo 2 veces al año), los indígenas (shuar) y el alcalde (Babosa, mote por el que le conocía).
Antonio José aprendió a conocer y respetar la selva y sus animales con los shuar. Después de enviudar de Dolores Encarnación del Santísimo Sacramento Estupiñán Otávalo, su valentía y conocimiento del medio le llevaron al peor encargo de su vida, tenía que matar a una tigresa.
Al firmar un documento, descubrió que sabía leer y que lo que más le entretenía y emocionaba eran las novelas de amor, que le hacía llegar el dentista. No os cuento más.
Dividida en 8 capítulos, de lectura fácil.
- N.º de páginas: 144
- Editorial: TUSQUETS EDITORES
- ISBN: 9788472236554
Se ha traducido a60 idiomas y alcanzó los 18 millones de libros vendidos. Fue llevada al cine en 2001, con guion de Luis Sepúlveda.
Opinión personal: Me ha gustado mucho. Es muy tierno. El viejo es un encanto, gran conocedor y defensor de la selva amazónica, sus costumbres y los indígenas, frente a los colonos que iban llegando para destruirlo todo.
Me llegó al alma un fragmento, después de una de sus lecturas: “Paul la besó ardorosamente, en tanto que el gondolero, cómplice de la aventura de su amigo… y la góndola se deslizaba apaciblemente por los canales venecianos”. Se preguntaba ¿Qué será besar ardorosamente? ¿Qué será una góndola? ¿Existirá Venecia? ¿Habrá llovido en exceso para que se hicieran canales? …
El libro está dedicado a Miguel Tzenke (defensor de la amazonia e inspirador del libro), a quien Luis conoció en una expedición a la selva, organizada por la UNESCO, para estudiar el impacto ambiental de la colonización.